El momento de los restaurantes “guerrilla”, temporales,
al límite de la legalidad, ha pasado, ahora en Italia es el momento de los “Home-Restaurant”,
como el término lo indica, los auténticos restaurantes abiertos en su propia
casa en la que puede encontrar espacio la creatividad culinaria y la
imaginación de cada uno.
Hoy en día estas cenas en casa son una de las muchas caras de la economía del compartir: compartes preparaciones genuinas con huéspedes desconocidos, lo que contribuye a los gastos de cada familia, todo a la luz del sol. Una oportunidad única para todos aquellos turistas con ganas de descubrir los gustos en vivo y los hábitos de las ciudades que los acogen: con los Home-Restaurant, de hecho, la cocina no es simplemente casera, si no que "hecha en casa".
Hoy en día estas cenas en casa son una de las muchas caras de la economía del compartir: compartes preparaciones genuinas con huéspedes desconocidos, lo que contribuye a los gastos de cada familia, todo a la luz del sol. Una oportunidad única para todos aquellos turistas con ganas de descubrir los gustos en vivo y los hábitos de las ciudades que los acogen: con los Home-Restaurant, de hecho, la cocina no es simplemente casera, si no que "hecha en casa".
¿Cómo se puede iniciar este negocio? Si todo se lleva
a cabo en el hogar, la práctica del Club de Cena no es un negocio. No necesita
la aprobación oficial, aunque es preferible obtener un certificado en seguridad
de los alimentos. En cuanto a la política fiscal, existe la posibilidad de
desarolla actividad ocacional, sin IVA, hasta un máximo de € 5.000 euros brutos
al año, el umbral para la exención de contribuciones. Si se supera dicha cantidad
será suficiente abrir un Rol IVA. Los ingresos generados, no más de 30.000
euros al año, en el régimen de los montos minimos.
¿Qué se necesita entonces? Necesitamos un poco de
espacio en la casa y la pasión por la cocina, la verdadera estrella. No sólo,
entre los "ingredientes", también se requiere una buena dosis de
hospitalidad, para hacer sentir al huésped a gusto y dejar que respire un
ambiente familiar, y explicarles las curiosidades del lugar visitado, y por qué
no, los platos sólo servido en la mesa.
Fuentes
Food24 - Il Sole 24 Ore
Eticamente
Urbanpost